Desconocimiento internacional arropa a Maduro y al CNE

 Desconocimiento internacional arropa a Maduro y al CNE

21 may 2018.- La principal lectura de los comicios realizados el 20 de mayo es que Nicolás Maduro, a quien el CNE le adjudicó la reelección con 5, 8 millones de votos, quedó deslegitimado como Presidente de la República, señalaron a Noticiero Digital analistas políticos venezolanos.

Los efectos de esta situación comienzan a verse este lunes, con el desconocimiento de la comunidad internacional de los resultados de una contienda en la que se denunciaron diversas irregularidades.

“Se concluye necesariamente que el señor Maduro no tiene legitimidad de origen y esto tiene un efecto devastador como lo es el rechazo de la comunidad internacional a la majestad presidencial. Esto comienza a darse con el desconocimiento de países influyentes y afectará de forma inmediata al cuerpo diplomático de Venezuela acreditado en el exterior”, afirmó el politólogo Oscar Vallés.

Explicó que la deslegitimación de Maduro se sustenta en las normas y la forma como se estructuró el proceso electoral, así como las condiciones de la contienda que distaron de los comicios que rigen los sistemas democráticos.

“Maduro sin duda no es legítimo, se autoeligió”, sentenció el politólogo Luis Salamanca. El analista recuerda que las presidenciales fueron precedidas por la inhabilitación administrativa de los principales partidos de la oposición y de la tarjeta de la MUD, “con lo que se violentó el principio de la democracia de que todos los que quieran participar en unas elecciones, pueden hacerlo. Maduro sacó del juego, de forma ilegal, a sus adversarios”.

El diputado Julio Borges aseveró que Venezuela ya no está sola como se evidencia en el rechazo de diferentes voces de la comunidad internacional a los comicios.

“Ya empezó el desconocimiento de la comunidad internacional al fraude de ayer. Ya se pronunció el Grupo de Lima y ahora vienen los países del G20 (Unión Europea y USA). Seguiremos trabajando con las democracias del mundo para lograr el cambio”, aseguró el parlamentario, que está en el exterior, desde su cuenta en Twitter.

El Grupo de Lima argumentó que no reconoce los resultados “por no cumplir con los estándares internacionales de un proceso democrático, libre, justo y transparente”. El bloque llamó a consultas a sus embajadores en Caracas.

Los gobiernos de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía, que integran el bloque, se comprometieron “a coordinar acciones para que los organismos financieros internacionales y regionales procuren no otorgar préstamos al Gobierno de Venezuela, por la naturaleza inconstitucional de adquirir deuda sin el aval de su Asamblea Nacional, excepto cuando el financiamiento sea utilizado en acciones de ayuda humanitaria”.

Abstención manifiesta

Oscar Vallés cree que la abstención vista el 20-M es un efecto claro del rechazo de la población a un proceso electoral viciado que fue organizado por un ente comicial sin garantías.

“El gran derrotado en la contienda fue el CNE, lo que reitera que debe torcérsele el brazo. Debe demolerse la caja negra del CNE. No hubo confianza en su proceso y creemos que la abstención manifiesta supera los 70 puntos. También se evidenció que la maquinaria del gobierno no jala más de dos millones de votos y que este pueblo de Venezuela no se vende por una caja CLAP”, subrayó.

Luis Salamanca indica que resulta inexplicable que la participación registrada por el CNE sea de 48% cuando, a las 6:00 pm, se calculaba en 32%. “Es difícil de creer que 4 horas haya aumentado 16 puntos la participación cuando se apreció un desierto electoral”, indicó.

Vallés acota que el retrato de la calle durante la jornada del 20 de mayo fue similar al de la elección de los miembros de la ANC.

“La cifra de 1,8 millones de votantes a favor de Nicolás Maduro es una cifra suficientemente creíble si efectivamente hubo capacidad de movilizar a los electores chavistas. Pero los centros de votación lucieron prácticamente de forma similar a los del 30 de julio. Y para esta contienda no hubo centros nucleados como ocurrió entonces en el Poliedro”, señaló.

En abril de 2013, Nicolás Maduro llegó a Miraflores con 7. 505. 338 votos y Henrique Capriles logró 7.363.980 votos. Estas cifras significaron 50,61% y 49,12%, respectivamente. En la jornada del 20-M, el mandatario consiguió 67, 7% de los votos y, el candidato Henri Falcón (AP), 21, 2% equivalente a 1. 820. 552 votos. El ex gobernador de Lara fue secundando por Javier Bertucci (Esperanza por el Cambio) con 925.042 votos y Reinaldo Quijada (UPP 89) con 34.614 votos.

Capitalizar el resultado

Luis Salamanca sostuvo que una porción de la abstención se debe al llamado de la MUD a no convalidar lo que la alianza consideró un fraude. Cree que los resultados deben ser capitalizados por el bloque opositor que, luego de estos comicios, “debe estructurarse y asumir posiciones clave para tomar un segundo aire”.

El analista puntualizó que el gran perdedor fue el candidato Henri Falcón quien “no le ganó ni al Gobierno ni a la MUD”. Cuestionó que el exgobernador de Lara hablara de fraude minutos antes de que el CNE emitiera el primer boletín y no durante la jornada en la que desde temprano se registró un cúmulo de irregularidades.

“Es impresionante como un señor como Falcón que sabía iba al matadero y que la mejor opción que tenía era retirarse a tiempo del proceso, no lo hizo. A punto de dar el resultado es cuando se da cuenta de que el proceso no era fiable”, señaló Salamanca.

Añadió que mientras Javier Bertucci se quedó con los votos de sus colegionarios en la fe, Falcón no pasó de tener una fuerza larense.

Refirió que el proceso evidenció que la base del chavismo es clientelar.

Deslave chavista

El director de Datincorp, Jesús Seguías, aseguró que el saldo de la contienda del 20 de mayo fue el declive del chavismo.

“El gran hecho relevante de estas elecciones no fue la victoria de Nicolás Maduro sino el deslave de chavismo, que es mucho mayor a lo anunciado por el CNE. Difícilmente se puede creer en la cifra de 5,8 millones de votos registrada para la reelección cuando fue evidente el desespero de los líderes del chavismo llamando a la gente a salir a votar, lo cual no ocurrió.

La cifra además es muy parecida a la de la última votación para las gobernaciones”, indicó.

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